Los implantes son estructuras de titanio en forma de tornillo que se integran y funden en el hueso maxilar para sustituir artificialmente las raíces de los dientes. Las fijaciones de titanio permiten restaurar las piezas dentales perdidas de forma segura y cómoda, y así evitar las complicaciones derivadas de su ausencia: desplazamiento del resto de dientes favoreciendo las enfermedades periodontales, caries dentales, problemas digestivos, pérdida ósea, problemas de la articulación de la mandíbula…

Sobre el/los implante/s, por encima de la encía, se pueden colocar diferentes tipos de prótesis: desde una sola corona dental hasta puentes de más de una pieza dental, e incluso, prótesis completas. Las prótesis imitan en apariencia y funcionalidad a un diente natural. Los implantes devuelven la función de masticación y mejoran la estética dental y la salud de la boca, consiguiendo que el paciente recupere la sonrisa.

El objetivo es recrear la apariencia natural de los dientes y reconstruir la sonrisa dañada fijando pequeñas prótesis o carillas dentales.

Tratamiento con implantes dentales

  • Previo a la intervención es imprescindible el estudio detallado de la historia médica del paciente, así como de las condiciones bucales iniciales. Durante este proceso utilizamos otros medios diagnósticos complementarios (radiografías, TAC, modelos, fotografías…) con el fin de obtener la máxima seguridad en el resultado del tratamiento.
  • El implante se coloca bajo anestesia local y en una intervención simple e indolora.
  • Tras la cirugía, el implante se deja reposar en el hueso entre 2 y 5 meses (según localización), con el objetivo de que el implante se integre o funda con el hueso y tenga lugar la osteointegración.
  • Pasado este tiempo de cicatrización y osteointegración, se toman unas medidas para iniciar la elaboración de la prótesis.

Beneficios de los implantes dentales

  • Los implantes dentales mejoran tanto la estética de la sonrisa como la funcionalidad de la boca.
  • El paciente vuelve a tener todas sus piezas dentales, recupera la mordida y la capacidad de comer con naturalidad y sin dolor.
  • Gana en salud, puesto que la colocación de implantes previene la degeneración del hueso tras la pérdida de un diente y alivia el desgaste y la rotura prematura de las demás piezas dentales.
  • Los implantes de titanio son biocompatibles con el organismo y no afectan ni perjudican a los dientes naturales.
  • La implantología constituye una solución definitiva y duradera para restaurar los dientes perdidos sin vivir una experiencia traumática o dolorosa.